El período de caza de ballenas fue brutal y que disminuyó drásticamente sus poblaciones en el mundo. Por ejemplo, el número de ballenas azules se redujo al 1% de su población original (350 individuos de 350.000). En Chile funcionaron siete balleneras en las zonas de Iquique, Valparaíso, Talcahuano, Valdivia, Quellón, Guafo y Punta Arenas donde procesaron cerca de 40.000 ballenas. La última ballena faenada en Chile fue en 1983 en Caleta Chome.
En el caso de los delfines la situación no es muy distinta, ya que en nuestro país muchos delfines y aves marinas se cazaron en la zona de Magallanes para ser usados como carnada para trampas de centolla y centollón. Sí, aquella preciada y apetitosa centolla. Se estima que entre 1970 y 1990 murieron al menos 14.000 delfines por esta causa.
Por estos motivos, para generar conciencia ciudadana, el 23 de julio de 1986 se proclama el “Día Mundial Contra la Caza de Ballenas”, fecha que posteriormente se cambió al “Día Mundial de las Ballenas y los Delfines”, con el objetivo de resaltar la importancia de estos cetáceos en el ambiente marino y no volver a esos límites de depredación.
En Chile desde el año 2008 está prohibido capturar, cazar, matar, perseguir o comercializar cualquier cetáceo en aguas chilenas (Ley 20.293). El país ha adherido a diferentes normativas internacionales que incluyen la protección de cetáceos, y también se han implementado medidas de conservación nacionales como las Áreas Marinas Protegidas, y la reciente declaración del Parque Marino Tic Toc - Corcovado.
¿Qué ballenas y delfines podemos ver en Chile?
¡Muchos! La ballena azul, jorobada, fin, sei y minke, entre otras, pasan por nuestras costas en primavera y verano rumbo a la Antártica para cumplir con su ciclo de migración en busca de alimento. Gracias a estudios científicos chilenos, sabemos que algunas ballenas, como la ballena azul y la ballena jorobada, se quedan en aguas chilenas alimentándose y cuidando a sus crías en zonas como el Golfo de Corcovado y Archipiélago de las Guaitecas.
Entre los delfines, los más comunes de observar en nuestras costas son el delfín nariz de botella, calderón gris, delfín austral, orcas (sí es un delfín tamaño XL, no una ballena), y nuestro único, pequeño y casi amenazado delfín chileno, que es muy especial porque sólo vive en Chile.
¿Y nosotros qué podemos hacer para aportar?
Los invitamos a buscar información, enseñar lo que sepamos sobre los cetáceos, y utilizar las redes sociales para el registro ciudadano de ballenas y delfines, aportando con tus datos de observación para generar información en red.
Esto lo puedes hacer en la página de Facebook “Red de observación de Mamíferos Marinos de Chile” o en la aplicación “Dónde la Viste”. Además, puedes informar a SERNAPESCA o universidades locales cuando ocurre un varamiento o muerte de cetáceos ya sea en el mar o en la costa. Y lo más importante, sumarse a la causa de conocer para conservar y difundir sobre la diversidad de ballenas y delfines en Chile.
Descarga gratis la Guía de Mamíferos Marinos del Sur de Chile de Fundación Oceanósfera acá.