¿Qué son las aguas grises y cómo puedes reutilizarlas?
Cada vez es más recurrente escuchar el término de aguas grises en nuestro diario vivir. Especialmente si es que estamos pensando en transformar nuestras casas en lugares más y eficientes y sustentables. Las aguas grises son aquellas que provienen del lavaplatos, lavavajillas, lavadora, ducha y lavamanos. Son aguas que a primera vista pueden parecer inservibles pero que, sin embargo, su reutilización consigue disminuir el consumo de agua potable y el vertido de aguas residuales.
Desde el año 2018, que en nuestro país existe la Ley de Aguas Grises Nº 21075, que busca regular el uso de las aguas grises, las que se diferencian de las aguas negras en que estas últimas contienen materia fecal y bacterias como la Escherichia coli, y por lo tanto no son aptas para su reutilización, sin ser tratadas previamente.
Las aguas grises pueden ser utilizadas para riego de jardines o plantas del hogar. En nuestra misión de cuidar las aguas del planeta y en medio de la crisis hídrica que estamos viviendo, es que queremos enseñarte a reutilizar las aguas grises de tu hogar, con el fin de ayudar a proteger y optimizar su consumo.
Lo primero que hay que tener claro, es que la utilización de ciertos productos como lavalozas, detergentes, jabón, shampoes y acondicionadores que contengan ingredientes como fosfatos, nitratos, amoniacos, afectan negativamente los ecosistemas acuáticos, debido a su capacidad de generar eutrofización. Por lo mismo, es importante que, si quieres reutilizar las aguas grises de tu hogar, seas consciente de los productos que utilizas en tu hogar y cuidado personal.
Queremos dejarte un relato que nos inspira y emociona, para que puedas tú también tomarlo como ejemplo y, junto a nosotras, traer más vida a tu hogar.
Tomás Elgueta reside en la comuna de Pichilemu, en la VI región del país, junto a su familia. En su casa, ubicada específicamente en el pueblo salinero de Cahuil, construyó una laguna para reutilizar las aguas grises de su lavadora.
“Hicimos una lagunita en nuestra casa para recibir las aguas grises de la lavadora, para no mezclarlas con las aguas negras del pozo; así no se sobrellena y no sale olor. Alrededor de unos cinco meses atrás cambiamos nuestro detergente a FreeMet. Lo primero que notamos fue que las plantas tomaron fuerza, porque con el antiguo detergente corriente que ocupábamos las plantas estaban muriendo y se estaba creando una especie de pantano en la laguna con no muy buen olor”, comenta Tomás.
A pesar de este ambiente con el agua contaminada, a la laguna llegó una rana africana. Esta es una especie introducida accidentalmente a nuestro país que se ha instalado en la zona central, desplazando a nuestra especie nativa de rana chilena, Calyptocephalella gayi, la cual está en peligro de extinción.
“Son ranas muy resistentes y a pesar de esto, comencé a ver que cambiaba de piel muy seguido, como si estuviese intoxicada, hasta que unos días después, la encontramos muerta”, añade. El aspecto de la laguna, las plantas y lo ocurrido con la rana africana, eran indicios de que las aguas grises que llegaban de la lavadora no servían para crear un ecosistema en el lugar.
Pero al cambiar a FreeMet, todo comenzó a mejorar: "Después de un tiempo, llegó un primer sapito de cuatro ojos, que lo noté por el canto. Unos tres días más tarde, comenzamos a escuchar a dos, tres sapitos. Empecé a visitar la laguna con una linterna en las noches para verlos ya que es la hora de más actividad de ellas. Hace poco aparecieron las posturas de huevo y los que están fecundados están en desarrollo, han salido algunos pirgüines ya”.
El cambio al detergente FreeMet que es biodegradable certificado y libre de sustancias tóxicas, ayudó a la creación de un ambiente propicio para la reproducción de el Coicoy o sapito de cuatro ojos, protegiendo el ciclo del agua y entregándole vida a los ecosistemas del lugar.
Es por esto que nuestro propósito es Cuidar el Agua, es Amar la Vida. Te invitamos a seguir ejemplos como el de Tomás Elgueta y su familia, reutilizando tus aguas grises para darle vida a plantas y otras especies. Recuerda siempre ser un consumidor informado y leer las etiquetas de tus productos para saber sus componentes, certificaciones y así no fomentar la contaminación del medio ambiente.